En un ciudad llamada Laewood (1898) existía un orfanato que era administrado por dos mujeres amorosas, la Señorita Pony y la hermana Maria, sus vidas estaban entregadas al cuidado de los niños huérfanos o abandonados por sus padres… una noche fría de invierno fueron encontradas cerca de la casa Pony dos pequeñas niñas, una de ellas de cabello negro llevaba una carta donde indicaban su nombre Annie, la otra pequeñita de cabello rubio solo llevaba consigo una muñeca llamada Candy, fueron recibidas con amor por todos los niños del hogar y juntas crecerían como hermanan y vivirían experiencias que las harían madurar y encontrar sus caminos.
Juntas crecieron y sus personalidades eran muy distintas, Annie era una chica tímida, llorona, insegura, vanidosa y celosa, Candy por el contrario era desapegada, alegre, divertida, traviesa, segura y temeraria, le gustaba trepar a los árboles, era buena con el lazo y retaba constantemente a los chicos del hogar de Pony, se había ganado a pulso el título de “Jefe” y era respetada como tal. Annie la admiraba pero en secreto la veia con recelo, se sentía un tanto inferior a ella por la seguridad que Candy demostraba.
Candy a su vez soñaba con quedarse algún día al cuidado de los niños del Hogar siguiendo los pasos de la Señorita Pony y de la Hermana Maria, Annie soñaba con ser adoptada por una familia de abolengo usar vestidos hermosos y viajar por todo el mundo!
Pasaron algunos años, Candy y Annie tenían sueños compartidos, habían jurado estar siempre juntas a pesar que Annie deseaba en el corazón tener unos padres y ser abrazada por ese cariño necesario de la familia.
Una tarde al salir de paseo Candy y Annie conocieron a un caballero de apellido Britter, Annie se enamoro de esa figura paterna mientras Candy renegaba de ese sentimiento, Candy siempre había sido independiente y al notar la inquietud de Annie la convenció de hacer un trato por defender su amistad a costa de la felicidad de Annie y de ella misma.
Pero la ilusión de Annie fue más fuerte e hizo todo lo posible por ser del gusto de los Britter y ser adoptada como hija. Candy tuvo que aceptar la desición de Annie de buscar su felicidad, Annie comenzó a escribirle cartas a Candy, hasta que un dia la madre de Annie la sorprendió y le prohibió siguiera con esa comunicación pues afectaria la imagen tan prestigiada de los Britter, Annie no tuvo más remedio que aceptar mientras su corazón se rompia, Candy al saber que su mejor amiga le pedía por carta terminar con la comunicación, salió corriendo hacia la colina de Pony sin saber que esa tarde conoceria a un Principe.
En resumen, esta es una serie de animación japonesa, que en clave de melodrama cuenta la historia de una niña llamada Candy White, que fue abandonada en un hogar para niños huérfanos dirigido por la señorita Pony y la hermana María junto a otro bebé, que fue llamado Annie. En el anime se dice que ocurrió un día de invierno y caía nieve, pero en el manga se convierte en un día de mayo.
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